Omar Abdulrahman: El mundo Árabe ama a su 10

Fuente: thenational.ae

Nombre: Omar Abdulrahman Al Amoodi
Nombre futbolístico: Abdulrahman
Club: Al Ain (Emiratos Arabes Unidos)
Fecha de nacimiento: 20/09/1991
Lugar de nacimiento: Riyadh (Arabia Saudí)
Nacionalidad: Emiratí
Posción base: Mediapunta
Valor de mercado: 3.000.000 €
Contrato hasta: 2013
Jugador similar a: Ronaldinho Gaucho
Twitter: @m_abdulrahman16
Preparado para primera división: Si


INTRODUCCIÓN

El día: 26 de Julio de 2012. La hora: cinco de la tarde. El lugar: el teatro de los sueños, ni más ni menos que Old Trafford. El contexto: primer partido del grupo A en los Juegos Olímpicos de Londres. El rival: Uruguay. Los protagonistas: Luis Suárez, Edinson Cavani, Arévalo Ríos y en menor medida un emiratí considerado estrella en Asia, Ismail Matar. Así me disponía a ver un partido a priori muy apetecible, por todo lo que representa en fútbol Uruguay y por su potentísima delantera.
Sin embargo, al poco de empezar el partido, como la historia de la chica tímida y recatada que decide arreglarse y presentarse al baile de fin de curso dejando embobados a todos por su belleza, mi atención fue sorpresivamente desviada hacia un jugador del equipo del golfo pérsico, con el dorsal 15 a la espalda y el 10 en la mente, que decidió hacer de esa tarde del 26 de Julio una pesadilla para los defensores y stoppers charrúas.
Fintas, controles orientados que sirven como driblings, centros milimétricos, quiebros, cambios de ritmo y un reguero de cinturas celestes rotas como rastro del crimen, fueron la carta de presentación que Omar Abdulrahman decidió entregar aquella tarde al mundo; en un escenario inmejorable, hizo acto de presencia un futbolista de condiciones inmejorables, humilde, hijo de inmigrantes Yemeníes de la nómada etnia Hadhrami, un chico forjado en el fútbol callejero, cantera única de anárquicos y geniales peloteros.
Emiratos Árabes, su selección, perdió aquella tarde el partido contra Uruguay, pero el joven Abdulrahman ganó; la admiración y atención del fútbol, el respeto de sus compañeros de profesión, el asombro de periodistas e incrédulos analistas y, sobretodo, el interés de equipos como Manchester City, Arsenal, Málaga y FC Barcelona por un joven de fútbol mágico y atrevido, genial y diferencial, que demostró tras aquel partido estar preparado para brillar en el fútbol de élite.
Poco después de aquella exhibición, el gigante Manchester City, tras tenerlo a prueba dos semanas, le ofreció un contrato que solo las estrictas leyes de inmigración británica impidieron firmar. Recientemente, los Citizen han vuelto a la carga y, con el ofrecimiento de cuatro años de contrato, esperan que la historia tenga esta vez final feliz para el joven Abdulrahman.
Aquellos que sostenían que lo que hacía en el campo era debido al bajo ritmo de juego del fútbol asiático, aquella olímpica y veraniega tarde vieron desmontado su argumento y no tuvieron más remedio que rendirse al nuevo amor del fútbol árabe, un auténtico 10 como los de antaño, liviano y de futbolístico look vintage, preparado para reconquistar, como sus antepasados árabes, la vieja Europa con unas armas bien distintas: Fútbol en estado puro.


TRAYECTORIA

Omar Abdulrahman nació en Riyadh, capital de Arabia Saudí, hijo de inmigrantes Yemeníes llegados al reino Saudí en busca de mejores condiciones de vida. El pequeño de tres hermanos, el joven Omar empieza a muy temprana edad a jugar a la pelota en los descampados del barrio obrero de Al Malaz, uno de los más humildes de la capital. Es allí precisamente donde un ojeador del Al Hilal lo descubre, y asombrado de que el joven Abdulrahman no juegue en ningún club, le ofrece fichar. Pronto descubre que la razón de que Omar no actúe en ningún club es debido a que no posee la nacionalidad saudí, así que tras muchos esfuerzos consigue que el gobierno del país árabe ofrezca al jugador dicha nacionalidad.
Pero Abdulrahman quiere conseguir la nacionalidad para su familia entera, no solo para el, así que rechaza el ofrecimiento de Al Hilal. Es ahí donde, desde el vecino Emiratos Arabes Unidos, el poderoso club Al Ain entra en escena, y aprovechando la situación, ofrece a Abdulrahman y a toda su familia la nacionalidad emiratí a cambio de fichar por el club, y Abdulrahman firma sin dudar convirtiéndose en jugador de Al Ain y súbdito de Emiratos Arabes Unidos.
Tras pasar por los diversos equipos inferiores del equipo emiratí, el alemán Winfried Schafer, por entonces entrenador de Al Ain, asombrado por su talento decide, allá por el año 2009, hacerle debutar en copa.

Fuente: thenational.ae

En julio de ese año todo parece torcerse para Abdulrahman al romperse los ligamentos en un partido amistoso. Recuperado en 2010 y conscientes de la perla que tienen entre manos, los técnicos del club deciden ir despacio con él, haciéndole permanecer en el equipo reserva hasta finales de 2011.
El año 2012 resulta crucial para él, ya que tras ser indiscutible en su equipo, y ya asentado en la selección absoluta, disputa con su país los juegos olímpicos de Londres.
Pese a caer eliminado en primera fase, el juego del equipo es bueno y a nivel individual la actuación de Abdulrahman es considerada asombrosa, por lo que su paso definitivo para llegar a la élite mundial parece dado. Grandes equipos europeos se interesan por él y el Manchester City, tras tenerlo a prueba, le ofrece un contrato. Pero nuevamente las trabas burocráticas se cruzan en el camino de Omar y le es denegado el permiso de trabajo, por lo que el futbolista decide volver a su país, donde en la presente temporada, y tras rechazar una oferte del Benfica, lleva anotados 7 goles y 10 asistencias en 18 partidos, cifras impresionantes y que, de cumplirse la lógica y acabar firmando finalmente por el City inglés (que le ofrece nuevamente 4 años de contrato), serán sin duda un gran legado para el club que apostó de pequeño por él, Al Ain.

Fútbol base: Al Ain
2008: Al Ain: 53 partidos, 21 goles.

INTERNACIONAL
Emiratos Árabes Unidos sub 20: 4 veces, 1 gol.
Emiratos Árabes Unidos sub 23: 15 veces, 1 gol.
Emiratos Árabes Unidos: 16 veces, 4 goles.


CARACTERÍSTICAS

Normalmente, cuando juegas a fútbol y eres muy bueno, superior a tus compañeros y rivales de partido, tiendes a ser individualista, a creer que por ti solo puedes marcar y ganar el partido. Un chupón, vamos.
Omar Abdulrahman es muy muy bueno, superior a sus compañeros y la mayoría de los rivales, y NO es individualista. Su juego asociativo es una de sus mayores virtudes, gusta mucho de buscar, combinar y asociarse en el centro del campo tocando en corto, al primer toque, dando el balón para ofrecerse acto seguido, y solo usa la jugada individual cuando la ocasión lo requiere; sobretodo, de tres cuartos de campo en adelante.
Gusta mucho de realizar paredes con sus compañeros, muy dinámico gracias a sus 1.74 cm, discreto físico, zurdo cerrado pero apto para dar buenos pases con la derecha, capaz de jugar por casi todo el centro del campo, ya sea de interior por varias bandas, extremo o mediapunta, superdotado técnicamente, salvando las distancias recuerda al mejor Ronaldinho, el de la primera etapa con Rijkaard.
Omar ofrece garantías para aguantar la posesión del balón, distribuye indistintamente en corto y en largo cuando actúa en posiciones centradas del campo, y cuando cae a banda suele irse fácil en el uno vs uno y buscar buenos centros a los delanteros. Gran toque de balón, posee un guante en la zurda y sus pases, con gran precisión y sobretodo timing, son perfectos.
Luchador cuando su equipo no tiene la pelota, obviamente no es un jugador de brega, pero tácticamente aguanta su posición y sigue (aunque no intensamente) a su par. Además del juego asociativo, otra de sus cualidades es su innata capacidad para dar el último pase, por alto, entre líneas o saltándose varias lineas defensivas, al más puro estilo Iván De La Peña. Si a esto sumamos unos números goleadores más que interesantes y en aumento temporada tras temporada, podemos convenir que estamos ante un jugador muy influyente de tres cuartos de campo hacia arriba.
Todo ello, recordemos, adornado de un aura de artista y malabarista, con regates de circo, aunque posee el acierto de usar estas suertes más como recurso que como adorno.
No os perdáis los vídeos a continuación, son una clara muestra de la magia futbolística del mejor 10 que probablemente haya dado el fútbol del golfo pérsico y, quizás también, del fútbol árabe.